Mi afición

Todo empezó siendo un niño, en un mañana fría de invierno, fuímos de visita a casa de unos amigos. Jugando y correteando por su morada, de repente levanto la mirada y observo en una esquina del salón, una urna de cristal que emana una luz muy intensa, con gran curiosidad me acerco sigilosamente y veo aletear a unos hermosos peces, sorprendido por sus formas y colores me quedé observándolos con fascinación, este es el día, que no he podido apartar la mirada.

jueves, 2 de febrero de 2012

Macropinna microstoma, un pez con la cabeza transparente




Se ha podido comprobar que sus ojos son capaces de rotar dentro de su cabeza con un escudo transparente, lo que literalmente le permite ver a traves de su propia cabeza, pudiendo seguir con su vista a sus presas e incluso enfocar su visión en lo que está comiendo. ¡Este pez tiene las ideas claras!.

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